Como cada verano, se intensifican los incendios forestales a lo largo y ancho del territorio nacional, provocando en muchos casos graves efectos ecológicos sobre los ecosistemas y la fauna salvaje sin olvidar las toneladas de dióxido de carbono emitidas a la atmósfera. Sólo en 2020 se contabilizaron 7.745 siniestros en los que ardieron 65.923 hectáreas. El sector del Vacuno de Carne reivindica, como también lo viene haciendo el ovino, el papel esencial que juegan los rebaños en la prevención durante todo el año y, además, de forma muy económica y sostenible, ya que la alternativa a las reses, o como se les llama coloquialmente vacas-bomberas requiere de gran cantidad de maquinaria pesada y el uso de combustibles fósiles contaminantes, a lo que se añade el riesgo para la integridad de miles de personas que participan en la extinción. (Fuente: Agroinformación)