Un equipo científico internacional, liderado por la investigadora de la Estación Experimental de Zonas Áridas (CSIC) Lucía DeSoto, determina que la mortalidad en árboles, está relacionada con su capacidad de resiliencia en los años más secos. Esta relación, aparentemente obvia, nunca se había demostrado hasta el momento de manera global. (Fuente: Ambientum)