Un estudio del investigador de la Universidad de Alcalá (UAH) Ignacio Morales-Castilla concluye que un aumento de la temperatura global de 2°C reduciría hasta en un 56% las regiones del mundo que actualmente son idóneas para la viticultura, mientras que un calentamiento de 4°C reduciría en un 85% las zonas vitivinícolas aptas para producir buenos vinos. (Fuente: Agroinformación)