Una investigación internacional en la que ha participado el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha demostrado por primera vez, y a una gran escala geográfica, que crear un paisaje agrícola con parcelas pequeñas y diferentes tipos de cultivo, favorece la biodiversidad de plantas y animales. Los resultados del trabajo, publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) indican que esta podría ser una medida alternativa para hacer frente a la pérdida de espacios naturales o semi naturales entre los cultivos. (Fuente: DICYT)