Se prevé que las remesas que los trabajadores migrantes remiten a sus países sigan creciendo este año. En la actualidad, una de cada nueve personas en el mundo depende del dinero que aquellos envían a casa. Este flujo de dinero contribuye al desarrollo de las naciones en una manera mucho mayor que la ayuda oficial al desarrollo o la inversión extranjera directa. (Fuente: ONU)