De un 6,42 por ciento de consumo final de energía en el transporte y unos 2.283 kilo-toneladas equivalentes de petróleo en 2020, a un 5,73 por ciento y 1.568 ktep en 2030. Esta es la evolución, en descenso, que plantea el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) para la participación de los biocarburantes en el transporte. (Fuente: Energías Renovables)