Las explotaciones de regadío y las comunidades de regantes vienen sufriendo desde hace años incrementos inasumibles en las facturas eléctricas que reducen la competitividad del regadío y producen un agravio con respecto a otros países. La superficie de riego en Andalucía supone 1.100.000 hectáreas (25% de la Superficie Agrícola Utilizada andaluza) y representan un 67% de la Renta Agraria y el 63% del empleo agrario (UTA). (Fuente: Agroinformación)