La adopción de la primera Estrategia sobre plásticos ha permitido, a juicio de la Comisión Europea, sentar las bases para una nueva economía sostenible del plástico, constituyendo igualmente un elemento clave en la transición hacia una economía circular y baja en carbono, además de representar un avance en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 y los propios del Acuerdo de París. (Fuente: Ecoticias)