Lo dice el Instituto Internacional de Derecho y Medio Ambiente (instituto IDMA), que considera que los nuevos límites que ha fijado la Unión Europea para las centrales eléctricas -entre ellas, las de carbón- "obligan a las centrales a invertir en las denominadas Mejores Técnicas Disponibles para reducir emisiones, lo que tendrá un efecto muy positivo para la calidad del aire en toda Europa". El plazo para cumplir con los nuevos niveles de emisión, más estrictos que los establecidos por la actual Directiva de Emisiones Industriales, es de 4 años. (Fuente: Energías renovables)