Video. El Parque Nacional de Doñana se ha quedado sin su guardería tradicional, esos hombres que vivían de día y de noche en el campo. Son la savia del parque porque son capaces de reconocer una nueva rama o un nuevo nido esté donde esté. Reconocen el sonido de los animales sin verlos y son capaces de descubrir a los furtivos gracias a las huellas.