La imperiosa necesidad de frenar el avance del cambio climático y edificar un futuro sostenible impulsa una transformación global hacia la economía verde. Este paradigma económico emergente prioriza la disminución de la contaminación, la optimización en el aprovechamiento de los recursos naturales y la expansión de las energías renovables, pilares fundamentales para asegurar la prosperidad social y económica a largo plazo. (Fuente: Ambientum)