La Comisión Europea propone que el lobo pase a estar ‘protegido’ en lugar de ‘estrictamente protegido’. La relación, amor, odio entre el lobo y el ser humano, viene de tiempos ancestrales. Su característico aullido nos traslada a la montaña, pero su instinto depredador es un problema para el ganado. (Fuente: Ecoticias)