Los conflictos, las condiciones climáticas extremas, las conmociones económicas, las consecuencias prolongadas de la COVID-19 y los efectos en cadena de la guerra en Ucrania arrastran a millones de personas en países de todo el mundo a la pobreza y al hambre, a medida que el aumento de los precios de los alimentos y del combustible empujan a las naciones a la inestabilidad, de acuerdo con el nuevo informe de puntos críticos del hambre. (Fuente: FAO)